Las casas y pisos cada vez son más pequeños. Eso es una realidad incuestionable. El precio del metro cuadrado lleva décadas subiendo y es por ello que cada vez más se realizan construcciones más compactas. Es por ello que en muchas ocasiones los propietarios optan llegado un momento por ampliar la casa, una reforma que debe hacerse con cabeza y con una buena planificación.
Si estás entre esas personas que necesita ganar espacio en su inmueble y que ya está mirando presupuestos de reformas integrales, antes deberías hacerte una serie de preguntas para después no llevarnos sorpresas. Es vital además para saber exactamente qué queremos y qué podríamos conseguir empezando las obras.
- ¿Qué necesidades de espacio tengo? Recomendamos tomar un cuaderno y un bolígrafo e ir repasando habitación por habitación –dormitorios, baño, cocina, salón, terrazas…– qué consideras que necesitarías cambiar para ganar metros a la vivienda. También si lo que queremos es ampliar estancias, tal vez para instalar una sala de juegos para los niños o bien para instalar una sala de trabajo.
- ¿Cuánto dinero nos podemos gastar? El presupuesto es uno de los aspectos fundamentales cuando queremos reformar la casa, así que una vez sepamos qué queremos, toca echar mano a la calculadora… ¡O más bien a la cuenta bancaria! Ya con ambos puntos, podemos empezar a preguntar a empresas especializadas qué nos podrían ofrecer con la conjunción de los dos puntos definidos: qué queremos y cuánto tenemos para conseguir ese objetivo.
- ¿De cuánto tiempo disponemos? Otro factor importante, sobre todo si no tenemos todo el tiempo del mundo y necesitamos que las obras estén finalizadas en una fecha concreta. Este punto podría influir en el coste de los trabajos, ya que es probable que si necesitamos que la vivienda esté lista con celeridad puede que suba el coste de las obras, ya que los trabajos serían bastante más duros e intensos. Sobre la duración de la reforma tiene mucho que decir el tipo de material que se elija, ¿eh? En este punto no dudes que la empresa que vaya a realizar los trabajos te asesorará convenientemente.
- ¿Qué tipo de materiales quiero utilizar? Según el resultado final que busques, así será el material que has de elegir para hacer las obras. No olvides nunca que las obras son engorrosas y que no suelen hacerse con frecuencia. Así pues, opta por aquellos acabados que ofrecen calidad, durabilidad y que, por supuesto, más te gusten.
- ¿Cómo será la convivencia con las ‘reformas’? Sin lugar a dudas, esta es una de las preocupaciones mayores cuando nos disponemos a cambiar por completo nuestra casa. Sin embargo, no hay que dejarse llevar por el pánico. Si las obras están adecuadamente planificadas, no tendrás por qué salir de casa. La alternancia entre dormitorios, baño, cocina, salón y otras estancias comunes permitirán que el día a día se pueda hacer en la vivienda sin necesidad de pedir alojo temporal a familiares.
Por último, aunque somos conscientes de que hablábamos de cinco preguntas, os dejamos un consejo muy sabio, fruto de la experiencia: paciencia, mucha paciencia, y piensa que pronto disfrutarás de tu casa, tu hogar, en versión mejorada. Ese pensamiento hará que todos los cambios y posibles incidentes merezcan la pena.
Si consideráis importante añadir otras cuestiones que hemos de hacernos antes de emprender una reforma total de nuestra casa, no dudes en escribirnos y contarnos.